Holden presenta el nuevo Caprice
Con los cambios tan importantes introducidos en el Commodore, parece que Holden ha agotado el presupuesto para la actualización del Caprice, la berlina más grande de la firma. Estéticamente apenas ha recibido modificaciones, si bien es justo reconocer que el precio se ha reducido en 10.000 dólares australianos, por lo que al menos es más competitivo.
Si bien en su exterior todo parece seguir casi como antes, lo más interesante está nada más abrir las puertas, con un salpicadero completamente nuevo, más ergonómico y atractivo. Estrena instrumentación, consola central con nuevos equipos de sonido y navegación integrados con pantalla de hasta ocho pulgadas, asientos más confortables y mayores posibilidades de equipamiento.
Aparecen por primera vez los sistemas de alerta por cambio de carril involuntario, Head Up Display, sistema de sonido Bose, alerta por colisión, control de estabilidad con función remolque, freno de mano eléctrico, cámara de visión posterior y sensores de aparcamiento delanteros con medidor de espacio lateral.
La gama de motores está formada por el 3.6i V6 LPG en combinación con la transmisión automática de seis velocidades, y el explosivo 6.2i V8 también asociado a la transmisión automática de seis relaciones. Es novedad que se incluyan levas tras el volante, lo que permite mejorar la rapidez de los cambios en modo manual. Las tarifas recomendadas arrancan en los 54.490 dólares australianos, unos 41.575 € al cambio actual.
Si bien en su exterior todo parece seguir casi como antes, lo más interesante está nada más abrir las puertas, con un salpicadero completamente nuevo, más ergonómico y atractivo. Estrena instrumentación, consola central con nuevos equipos de sonido y navegación integrados con pantalla de hasta ocho pulgadas, asientos más confortables y mayores posibilidades de equipamiento.
Aparecen por primera vez los sistemas de alerta por cambio de carril involuntario, Head Up Display, sistema de sonido Bose, alerta por colisión, control de estabilidad con función remolque, freno de mano eléctrico, cámara de visión posterior y sensores de aparcamiento delanteros con medidor de espacio lateral.
La gama de motores está formada por el 3.6i V6 LPG en combinación con la transmisión automática de seis velocidades, y el explosivo 6.2i V8 también asociado a la transmisión automática de seis relaciones. Es novedad que se incluyan levas tras el volante, lo que permite mejorar la rapidez de los cambios en modo manual. Las tarifas recomendadas arrancan en los 54.490 dólares australianos, unos 41.575 € al cambio actual.
Comentarios
Publicar un comentario
Por favor, procura que los comentarios estén relacionados con el artículo.